¡oh! mi papá, tan bello, tan dulce, tan generoso
¡oh! mi papá, amaba su sonrisa
¡oh! mi papá, encontraba en el fondo de sus ojos
todos los placeres que los niños desean
me tomaba en sus rodillas, ¡ah! qué felicidad
me hablaba y me entretenía durante horas
¡oh! mi papá, tan bello, tan dulce, tan maravilloso
comprendía la menor de mis penas
y calmaba mis lágrimas con un solo beso
él, tan amable, me hace falta hoy
¡oh! mi papá, tan bello, tan dulce, tan maravilloso
comprendía la menor de mis penas
y calmaba mis lágrimas con un solo beso
él, tan amable, me hace falta hoy.

¡oh! mi papá.

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