La poesía se ha ido
Sospecho que pasó por tu casa
Que se tumbó en tu cama
Y escuchó la lluvia en el techo
Tenía tan poco que confesar
No del tipo que se desahoga demasiado con algunas palabras
Que dejó en tu escritorio
Algunos tachones con el bolígrafo
Luego se fue
Luego se fue

Nos tomó unos días
Para ser menos ciegos y sordos y encontrar
Que el aire era un poco más pesado
Nuestros hombros un poco más encogidos y pensar
Que después de haber anunciado tanto
Una partida mil veces pospuesta, ella sueña
Quitar el abrigo del gancho
Donde había colgado durante siglos
Luego se había ido
Luego se había ido

¿Somos niños perdidos?
El bosque a la vista para la noche
Se niega a abandonarnos
Dejar todo el poder a la oscuridad
Sobre nuestra historia mal comenzada
La luna llena es convocada para frustrar
Las trampas de una noche demasiado oscura
En los alrededores de un matadero
Sin un poema para salvarnos
Sin un poema para salvarnos

No sé por qué pensaba
Que no podría haberse ido, sin pasar
Por tu casa y en tu escritorio
Vi los tachones con el bolígrafo, algunas palabras
Que se deslizaron sobre mi piel
Sobre tu rostro y tus manos tomaron
El ritmo de un corazón en suspenso
Y su piel también era débil
Pero tendríamos que aferrarnos a ello
Pero tendríamos que aferrarnos a ello

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