Nado en Contra est une chanson en Espagnol
La frontera entre el silencio y el vacío, la palabra sigilosa, la que sientes como abrigo, la furtiva, la indeleble,
alivio liquido en la lívido, la lirada posada en el oído, el alarido, la bandada de aves, el dolor que habita a la vez
, el mundo gira al revés, nada es como lo ves, nado en contra lo sé.
Saca esta bruja quimérica cuan anímala lírica, la métrica en la estética, la mística poética, la vivida botánica
, enigmática, ramera, rezandera, rivera, romero, curandera, sin cadenas, y la queja, la vagina herida que la vida habita la liberas,
venimos desde la hoguera, con la luna entre las piernas resurgimos de la histeria. Nada es como lo ves, nado en contra lo sé.
Fuimos abducidos por los pinceles, desnudamos la mirada, el interés, sin querer, sin creer, sinceridad y saber, de sed vencer,
ahondarse y ser, romper el límite, volver sin timidez, envuelta en placidez, no somos vírgenes, voy con Arquímedes, llevo
mis líquenes y mis quimeras, Colombia te espera, poemas y crímenes tocamos fondo en el azul profundo, parimos letras,
rituales al junco, alunizajes de nuevo al nocturno, Neptuno a lo lejos el hombre que alumbro, crecí en la palabra, en el sol
y en el agua, en la selva que canta, una planta levanta, la vivida cándida. crecí en la palabra, en el sol y en el agua, en la selva
que canta, una planta levanta, la cuerpa me aguanta
Hemos renacido, hemos florecido, caminamos con los pies enraizados a la fuerza de la de la lucha, de este sexo que se abre
dando vida, de las muchas que se fueron por defender libertad, porque nos cercenaron la libertad y nosotros la reclamamos,
y los cuerpos se extendieron, y las voces se regaron, y éramos muchas semillas hablando con la tierra de ancestrales trazas.
Ahora mujer, punto de lo incalculable, de lo eterno, desnúdate ante la sombra, desnúdate ante la luz, vuélvete océano, habita
los campos, fecunda los tiempos, centro del agua, que limpia, que aclara.
Reposa tu cuerpo sobre las altas montañas, sobre la pureza de tu existencia, sobre la liviana candidez de tu sexo,
Tú, salvaje como la vida y dulce como la muerte abraza la luna contra tu pecho y con ella renace.