Entre un pilar de hojas doblado en obsesión
Sus días son tras humo en profunda introspección
Dedicado a de sus notas edición
En letras su neurosis haya sublimación

Devoto es del orden y limpieza
En su mesa cada cosa tiene un sitio
Más en su cabeza es sucio
Un rostro regio oculta sus bajezas

Profesa su ser, mental es su fé y
Su templo corporal, su ritual es
Canalizar lo humano y lo animal en
Su rito rutinario para retirar el mal

Sale poco de paseo, aborrece irse de viaje
No es un viajero, más al Odiseo
Un poco se parece en ingenio y en bagaje

Él Sigue a Tobón Sanín,
A Chomsky afín, lee a Ortega y Gasset,
Es un aprendiz de Van Dijk,
Su diario estudiantil huele a bareta y café

Leyó a Marx, no es marxista
A Bakunin, menos anarquista
A Nietzsche, ni nihilista pues
Él tiene fé en su obra como artista

Admira de Mishima vida y muerte
La coherencia política de Borges
Cuan Bukowski Él ve la morgue
Como un retiro al que irá con suerte

En su arte ha influido Schopenhauer
Es un pesimista con fluidez
y al igual que Charles Baudelaire
Para Él siempre la hora es la hora de embriaguez

Mira dulce, su alma agria
La moral su causal de gracia
Melodías atrapan su atención
Él solo se dedica a su invención

Con su tiempo buen negociante
No se le hace extraña la bonanza
Él capitaliza instantes mientras
Se pregunta, ¿cón una vida alcanza?

Sabe que es finita y no idealiza
Que el tiempo transita con prisa
A la música, Él analiza
La escala menor armónica lo hechiza

La moral de su era es obsoleta
Le ralentiza el alcance de metas
ÉL argumenta, un plan no se concreta
Si la mente a la utopía se sujeta

Sus versos son retratos psíquicos
Tiene ojo fotográfico, Capta lo intrínseco
Buen gusto estético
Él Ve lo bello en lo cómico y lo trágico

Es Fausto a su manera
Con algún demonio negoció nunca ser novio
Pero al verse soberbio se libera
Él vio en la soberbia otra titiritera

Quimeras, Él no las concibe
Esperanzas, se las prohíbe
Sus deseos, no los cohíbe más
Sabe que idealizar es el declive

De ideales, Él declina
Evita sendas serpentinas
Es un pragmático, y en su doctrina
El valor máximo es la disciplina