Es
En esos espejos que tú tiras por la calle
Dónde veo lo que quedó de mi
Aquello que sobrevivió a tu desastre
El frío y húmedo aire donde quiero vivir
Es
Tu regalo de porcelana llamado paz
No le gusta mi compañía y por eso se va
Es
La silenciosa oscuridad
De la que estás hecha
Dónde yo me quiero quedar
Y una vez más te alejas de mi
De nuevo me dejas solo entre mi inmundicia
Sensación pacífica
Que lindas tus palabras
Inolvidables tus caricias
¿Será avaricia?
Querer buscarte en todas esas lunas
¿O será fortuna?
Encontrarte y una instantánea eternidad tenerte
¿Que más pedirte?
Si tu sola presencia es propósito de la vida
A veces me olvidas
Puntual tu desprecio cuando necesito refugiarme
¿En dónde estás querida mía?
¿Será tu hogar en ese casi final del día?
¿O estás dividida?
Fragmentada en estas mujeres tan hermosas
Admiro tanto la figura femenina
Su intermitente aparición
El hombre a imagen y semejanza de un Dios
Pero la mujer, paradójicamente más divina
¿Estás ahí querida?
¿O es que tú sede está en esa confusa alegría?
¿Habrá que definirla?
¿O solo agradecer cuando se nos concede?
Te busco en fríos labios
Pero apareces en el silencio de esta mente
Feroces ruidos no me dejan verte
¿Como callar tantas voces?
Gracias por retirarte
Pero solo porque tú falta es mi camino a exigirme
Aunque tu silencio comienza a agotarme
¿En que vas a convertirme?
Estás ahí querida?
¿O es que tú sede está en esa confusa alegría?
¿Habrá que definirla?
¿O solo agradecer cuando se nos concede?
Te busco en fríos labios
Pero apareces en el silencio de esta mente
Feroces ruidos no me dejan verte
¿Como callar tantas voces?
Gracias por retirarte
Pero solo porque tú falta es mi camino a exigirme
Aunque tu silencio comienza a agobiarme
¿En que vas a convertirme?
Comienzo a entenderte
No puedo mostrarte, ni explicarte
Y dejo de admirarte
Comienzo a apreciarlo
Comienzo a apreciarlo
Comienzo a entenderte
No puedo mostrarte, ni explicarte
Y dejo de admirarte
Comienzo a apreciarlo
Comienzo a apreciarlo