Si hablamos de la noche, de las noches y sus gracias,
Si hablamos de los besos, abrazos y caricias,
Si la culpa no es mía, no es tuya es de la vida,
Quien señala con dedo la mentira…

Segundo tras segundo, el tiempo es un intento,
En busca del camino íntimo a lo infinito,
Ahora yo encuentro en eso tierno,
Que provoca escalofrió cuando lo recuerdo.

Hoy vuelvo al pecado, pecado de ser humano,
Son las huellas del pasado, sentimientos frutados,
Abrazo a la ira, agradezco lo mundano,
Con las risas inquietantes de lo desterrado.

Hoy lloro, y lloro de desprecio,
Mi pago, mi precio, mi error, es lo que me condena,
Me someto aceptar y a romper las cadenas,
Me crucifica el dolor, pero es el que me ¡ libera !


Y volare… hasta que te pueda olvidar,
Y dejare… mis lágrimas al mar,
Y volare… hasta que me pueda encontrar,
Y dejare… esa luz con su final.


No dejamos de querer en un día, solo pasa,
Nos soltamos de las más manos, es la esperanza,
Encontramos lo invisible en lo posible (pausa),
El aire es de todos “YO” la causa…

Con la fuerza del recuerdo que hoy olvidas,
Siguen las manecillas, noches de pesadilla,
Naufragio en la mejilla, “sola” sigue la silla,
No sangra solo duele si se tacta, esa astilla.

Si los ojos los cerramos, vendamos,
Y botamos. Sabemos si perdimos o ganamos,
Es la primer paso, define lo que hagamos,
Cual es el resultado, si soltamos y olvidamos?

Te guardo en el recuerdo, el recuerdo del olvido,
Pero agradezco todo lo vivido, no es una despedida,
Solo el inicio de partida, sin llagas, sin heridas,
Vemos con ojos? fin de las retahílas…


Y volare… hasta que te pueda olvidar,
Y dejare… mis lágrimas al mar,
Y volare… hasta que me pueda encontrar,
Y dejare… esa luz con su final.