Ya cuanto quieres y por cuánto debes callar
siempre sueles olvidar
donde me quieres mirar
me miras al despertar
te olvidas de recordar
dejando todo al entrar
es imposible soltar
perdido en ti
perdido el tiempo que es contigo
y aunque lo tuviera todo seguiría siendo un mendigo
que mas te digo
solo contigo
solo conmigo
solo conozco lo que soy siempre me obligo
y te digo donde estamos sin saber a dónde iremos
yo te digo que te amo y que siempre nos tendremos
si pierdo mi vida en un segundo temor constante
un despertar alucinante luna menguante
es evidente evidente como siempre
inconcebible un escritor inconsistente
pasajero al sur en un tren de media noche
llenos de humo regresamos pero en coche
trasnoche quiero vivir pero para cantar
lugares donde los hombres liebres aún temen viajar
sabre olvidar pero solo lo necesario
aprendo a estar si ti en un combate extraordinario
la ciudad me enseña lo que esconde tras sus fauces
siempre habrán motivos para que el hombre se encause
y yo zurcare el cielo hasta que lograse algo
probarles que estoy aquí y por mi palabra valgo
salgo vuelvo y salgo vuelvo y regreso
rese tanto por eso y por eso ya no seso
explotan mis sesos sabes ya no puedo más
donde vas donde estas por que no te perdonas
somos tan distintos el valor de una promesa
sentí envidia por la fuerza y rabia por la tristeza
zorro de vista corta el peso de estos años
historias viejas los amigos los engaños
los días de risas los mares de llanto
por la ausencia de los míos que instantes ya no aguanto yo
sentir ser libre al cobijo de las llamas
lo que no perdona el tiempo
lo que él mismo me reclama