Walt Grace, odiando desesperadamente todo su lugar,
Soñó con descubrir un nuevo espacio,
Y se enterró vivo,
Dentro de su sótano, con la lengua al lado de su cara cuando,
Trabajaba en el desplazamiento,
Y lo que se necesitaría para sobrevivir.

Porque cuando terminas con este mundo,
Sabes que el siguiente depende de ti.
Y su esposa les dijo a sus hijos que estaba loco,
Y sus amigos dijeron que fracasaría si lo intentaba,
Pero con la voluntad de trabajar duro,
Y una tarjeta de biblioteca,
Tomó un paseo en un submarino casero, con hélice, para una sola persona.

Esa mañana, el mar estaba furioso y lo digo en serio,
Olas tan grandes como las había visto,
Profundamente en sus sueños en casa.
Desde tierra firme,
Lo rodó hasta la arena mojada,
Cerró la escotilla con una mano,
Y se fue pedaleando solo.

Porque cuando terminas con este mundo,
Sabes que el siguiente depende de ti.
Y por una vez en su vida estaba tranquilo,
Mientras aprendía a girar en la marea,
Y el cielo estaba en llamas,
Cuando salió a tomar aire,
En su submarino casero, con hélice, para una sola persona.

Una noche,
Cuando habían pasado semanas desde su partida,
La llamada que ella había planeado recibir,
Finalmente llegó a casa.
Ella aceptó,
Las noticias que nunca había esperado,
El operador conectó,
Una llamada desde Tokio.

Porque cuando terminas con este mundo,
Sabes que el siguiente depende de ti.
Ahora sus amigos,
Lo mencionan cuando están bebiendo,
En el bar con su nombre al lado,
Y sonríen cuando pueden,
Mientras hablan de un hombre,
Que tomó un paseo en un submarino casero,
Con hélice, para una sola persona.

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