Niños de los parques, chiquillos de las playas
El viento amenaza los castillos de arena, moldeados con mis dedos
El tiempo no perdona a nadie, por desgracia
Los años pasan, el eco se escapa en la Duna de Pyla

Al ritmo de las estaciones, de las cabinas de fotos
Me entrego a esos destellos del pasado
Al ritmo de las estaciones, de las decisiones, me entrego

Cuando los recuerdos se entrelazan, las lágrimas me vienen
Y el canto de las sirenas me sumerge de nuevo en invierno
Oh, melancolía cruel, armonía delicada, euforia solitaria

Ta-dada-dan, ta-dada-da
Ta-dada-dan, ta-dada-da

Cuántas bromas, cuántas travesuras
Cuántas huellas, cuántas máscaras
Hemos dejado allí
Dejar las armas, tomar la distancia
Encontrar la calma en este ruido antes de que me ahogue

Al ritmo de las estaciones, de las cabinas de fotos
Me entrego a esos destellos del pasado
Al ritmo de las estaciones, de las decisiones, me entrego

Cuando los recuerdos se entrelazan, las lágrimas me vienen
Y el canto de las sirenas me sumerge de nuevo en invierno
Oh, melancolía cruel, armonía delicada, euforia solitaria

Oh-oh

Cuando los recuerdos se entrelazan, las lágrimas me vienen
Y el canto de las sirenas me sumerge de nuevo en invierno
Oh, melancolía cruel, armonía delicada, euforia solitaria

Cuando los recuerdos se entrelazan, las lágrimas me vienen
Y el canto de las sirenas me sumerge de nuevo en invierno
Oh, melancolía cruel, armonía delicada, euforia solitaria

Ta-dada-dan, ta-dada-da
Ta-dada-dan, ta-dada-da

Tadalalala, tadalalala
Tadalalala, tadalala

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