Me conecto con mi yin-yang, luz y oscuridad
Masculidad feminidad la dualidad
Va más allá del género sexual,
No es igual
Hay diferencia está en el actuar
Sentir o pensar
La capacidad de ver un todo y fragmenta
Racionalizar o en la intuición confiar
La diversidad infinita de encontrarse
Con la multiplicidad de ser
Que, suele verse
Atormentado porque no quiere creer
Pues, le es más fácil someterse
A lo que ya es
Así de simple y adaptable
A las líneas jerárquicas que invaden
Nuestras mentes
Que permanecen
Adormecidas con vitrinas que establecen
Lo que es tener un cuerpo y esclavizarse
A través de estúpidos estereotipos que hipnoticen.



Entendimiento, integracion del polo que
Ahora ignoro pero intento
De comprender el modo de ser solo lo que siembro
En cada espero aflora un todo y con la loba
Es obvio que este lobo aulla al viento
Y dejar que fluya sin censura y con ojos despiertos
Cada hoja que acongoja la bruja que afloja
Las burbujas que sin brujula encuentran un buen puerto
oye dime todo lo que realmente piensas
Cuando vizualizamos la vida suvisamos ahora
Y sin preambulo ni calculos en fin recibe si recide
En ti el yin que simplemente juega con el yang
Navega el mas alla
Estrategas con un plan feminista antipatriarcal
Al alquimista que con tinta hay que contar
Letrista en vita de que en mis papeles dicta la equidad

Coro:
De apoco voy sumergiendo la dualidad
Y veo como va surgiendo la complicidad
Descubriendo es espacio de la sensacion
E ir diferenciando cada emocion
De pequeño me decian que debia hacer caballero
Firme como un roble pues el hombre no demuestra miedo
Ni emociones ni intuiciones que superen a ese ego
Que hay de malo en el llorar, al desahogo en un pañuelo
Oye abuelo, escucho siempre a la abuela entre mis sueños
Dandome consejos de que de ellas no somos dueños
Mas bien somos una era en donde estrellas y luceros
Iluminan el camino al compartir ambos senderos.


De apoco voy sumergiendo
La dualidad
Y veo cómo va surgiendo
La complicidad
Descubriendo el espacio
De la sensación
E ir diferenciando
Cada emoción


De pequeña me decían que debía ser señorita
Sentarme piernas juntas, educada y con faldita
Siempre positiva, sonriente y bien portada
Como cenicienta doce en punto acostada
Pero no, nunca me hizo sentido
Que fuera todo tan establecido
De separarnos tanto por lo que esta abajo del ombligo
La cumbre de los arboles jugaba con migo.