Te metiste en lo más dentro de la piel,
desencajaste los ideales de un futuro,
volamos hacia lo incierto, aquello que no se puede ver.

Yo me pierdo del murmullo y veo en lo profundo de mi propio mundo,
sombras pasan con las horas, respiro y me hundo con cada segundo.

Con solo una palabra,
el fuego prende el alma,
el cuerpo ardiendo en llamas
demonios internos que hablan,
viviendo cada mañana con un nudo en la garganta.
Me siento tan atada como un barco a un ancla.

Inhalaste aires de colores miel,
exhalando mil razones para atravesar los humos.
Volvamos a darnos un tiempo para no retroceder.

Yo me pierdo del murmullo y veo en lo profundo de mi propio mundo,
sombras que pasan con las horas, respiro y me hundo con cada segundo.

Con solo una palabra,
el fuego prende el alma,
el cuerpo ardiendo en llamas
demonios internos que hablan,
viviendo cada mañana con un nudo en la garganta.
Me siento tan atada como un barco a un ancla.

Con solo una palabra,
el fuego prende el alma,
el cuerpo ardiendo en llamas
demonios internos que hablan,
viviendo cada mañana con un nudo en la garganta.
Me siento tan atada como un barco a un ancla.
Me siento tan atada como un barco a un ancla.