(Verse 1)
En un pequeño pueblo, bajo un cielo gris,
nació una sonrisa, pero su vida no fue feliz.
La alegría en su corazón, la familia no la veía,
y en su mundo de sombras, solo envidia y odio crecían.

(Tu oscuridad se nota en tus ojos profundos)
(Tu maldad en tu cuerpo se nota por eso tan robusto)
(Una pobre alma que manipulas se terminará con todo y tu rumbo )
(El dolor y tristeza a ti y los tuyos los seguirá hasta loe profundo)

(Chorus)
Pero ella, la payasita, con su rostro pintado,
encontró en el circo su lugar, su sueño despierto.
Con cada paso y cada risa, rompiendo las cadenas,
la payasita robusta, mostrando su fuerza.

(Verse 2)
Desde pequeña, soñaba con el color y el brillo,
pero la vida cruel le enseñó a ser fuerte y sutil.
Miraba a los demás vivir, con envidia en sus ojos,
pero dentro de ella latía un corazón valiente y heroico.

(Tu dolor y envidia se nota en cada cagadas más rotundo)
(Tus tácticas tan viejas como tu cuerpo al punto)
(El amor que tienes solo es vicio rotundo con poca oportunidad de salir del rumbo)
(Entre más haces más undes a los tuyos)

(Bridge)
Y así fue como aprendió a amar lo que era,
a ser feliz por sí misma, sin necesidad de más.
La payasita robusta, con su risa contagiosa,
se convirtió en una estrella, brillando más que nunca.

Coro:
Conoció a su príncipe azul, una luz en la oscuridad,
lo que le sacó de su vida de desgracia y miseria.
Pero el amor no fue suficiente para cambiarla,
y se sumergió en una espiritualidad oscura y severa.

(Piensa y razona que eso es lo que no se te da en lo mínimo)
(Retraso en tu cabeza son lo más oscuro)
(Tus problemas se refleja en tu cara toda inquieta y oscura)
(Tu alma se a ido por completo con esos ojos de mapache que te cargas)
(El dolor y tristeza llegarán a lo más refundó de tú alma)

(Chorus)
Porque ella sabe que la vida es un gran espectáculo,
y aunque haya tenido días oscuros y tristes,
la payasita robusta, con su espíritu inquebrantable,
se levanta cada vez más alta y más brillante.

(Toda tu maldad te llegara de formas que no entenderás)
(Y con tu cara de pena… solo dejarás claro que eres culpable de tu propio esclaro)

(Outro)
Después de todos los sustos y los intentos fallidos,
la payasita encontró su lugar en el mundo.
Con una sonrisa verdadera y un corazón abierto,
finalmente tuvo su merecido, brillando como el sol.


(Colorín colorado la gorda a callado)