Por la mañana al levantarme, no tengo hambre
me preparo un café para poder despertarme,
me arrastro por la casa y voy sintiendo calambres,
recuerdos de locura de desfase y desastre.
Todo comenzando a las 7, me encontraba a mi gente
ellos ya sabes solo verme si ese día voy caliente,
vamos a la tienda de enfrente a pillar un litro y todo es muy diferente.

Ya van llegando cada vez somos más
esto parece el camarote de los hermanos Marx,
todos somos culpables no se puede parar,
la party ha comenzado se viene el vendaval.
De a poquito ya se enciende el ambiente
veo caras nuevas y las caras de siempre
pienso para dentro hoy es mi día de suerte y mañana ya si eso reptaré cual serpiente.

Siento el veneno en la piel
cuando la luna se esconde,
no tengo remedio, disfruto la vida
y ya no me acuerdo de mi nombre.

Siento el veneno en la piel
Cuando la luna se esconde
no tengo remedio disfruto la vida
No recuerdo con quién ni dónde.

No pensaba hacer nada este finde
más que consumirme en mis miserias hasta dormirme
pero recibo un oportuno telefonazo descuelgo y respondo donde quienes y cuando?.
El muerto al hoyo yo! y el vivo qué sé yo
pero si me llaman estos payos pues allá que voy.
Abre la puerta niño el día va a comenzar por fin
salgo de casa, pero también quiero salir de mí.
Necesito mis dosis de risas,
de besos, de abrazos, de music, de birras...
La virgen santa, neveras repletas de latas
mi gesto de abrirlas se repite como un mantra.
Divisando la resaca de mañana
sé que me esperan demonios en las 4 esquinas de mi cama.
Esto me va a costar 3 días de penitencia
Le ruego a dios que no me lo tenga en cuenta.

Siento el veneno en la piel
cuando la luna se esconde,
no tengo remedio, disfruto la vida
y ya no me acuerdo de mi nombre.

Siento el veneno en la piel
Cuando la luna se esconde
no tengo remedio disfruto la vida
No recuerdo con quién ni dónde."