Todo comenzó como un cuento de amor
Lleno de tus flores amarillas
Que siempre te regalaba al encontrarnos
Cada miércoles, al mediodía
Era para ti mi corazón
De allí se escapó esta melodía
Viajaba adonde estabas como un diente de león
Como los que siempre te traía
Ay, mi amor, desde que te has ido ha muerto el sol
Ay, mi amor, ya no quedan dientes de león
Te faltó el cariño y el calor
Me sobraban ganas, vida mía
De cuidar lo que teníamos que cuidar los dos
De cuidar las flores cada día
Se me fue arrugando el corazón
Se iban alejando aquellos días
Se te fue enfriando el alma, se nos fue el color
Se nos dieron mal las despedidas
Ay, mi amor, desde que te has ido ha muerto el sol
Ay, mi amor, ya no quedan dientes de león