Tocaron a mi puerta y me pidieron ser el personaje principal
Sin dudarlo acepté porque sabía de lo que yo era capaz
Me miré al espejo
Se me infló el pecho
Comencé a aprenderme uno a uno cada verso
Siéndote honesto
Di todo mi esfuerzo
Le dije a mi madre “ha llegado mi momento”
Y en primera fila
Estaba ese día

Fue cuando sentí que mis latidos se aceleraban
Que se me olvidaban las palabras
Y que las luces no me asientan bien
Y comprendí que aunque iba en busca del aplauso
El peso que cargué fue demasiado
De ser protagonista aquella vez
Pude sentir que tal vez yo no era el indicado
Y admitir lo siento a los que he decepcionado
Pero el protagonista yo no puedo ser

Fue allí en medio de mi ansiedad y orgullo cuando pude descubrir
Que siempre hubo alguien esperando por cargar el peso que viví
Le entregué el puesto
Me dijo en silencio
Déjame que yo me voy a encargar de esto
Me quedé perplejo
De su gran talento
Parecía que ya conocía cada verso
Y llegó el momento
Y ya no había nervios

Fue cuando entendí que el protagonista de la historia
Se sabía la obra de memoria
Y que las luces le asientan bien
Y comprendí que solo él era digno del aplauso
Que mi lugar estaba a su lado
Viéndolo actuar y descansando en El
Hoy entendí que siendo el personaje secundario
Puedo vivir y respirar bastante más liviano
Porque el protagonista siempre ha sido el

No quiero olvidar que soy el personaje secundario
Y que el principal eres solo tu, Jesús amado.