Pinta mis manos como los días grises,
escucha como palpitan mis matices,
deja que gane el juego,
tú quemas mis raíces,
le prendes fuego,
le prendes fuego.

Los aretes que le faltan a la luna,
los tengo guardados en el fondo del mar.
Los aretes que le faltan a la luna,
los tengo guardados para hacerte un collar.

Me deshago
como en agua el algodón.
Nunca me intimidaron tanto unos ojos marrón,
prenderte fuego hasta hacerte carbón,
para luego con soplar encenderte en otra ocasión.
Yo el Aquiles tu mi talón,
tú la ceremonia, yo la bulla al bajar el telón,
tú el cinturón de orión, yo la cabuya del pantalón,
tú la niña guapa con la nea del salón.
Acariciarme, como la brisa,
pero con menos prisa.
Dos desordenados mentales ordenando pizza,
en la movie a lo Pixar.
Se acelera el palpitar, al quitar
sal de tu mar.
Encallé en las orillas de ese lunar
Pa’ naufragar, como tú no existe otro lugar.

Los aretes que le faltan a la luna,
Los tengo guardados en el fondo del mar.
Los aretes que le faltan a la luna,
Los tengo guardados para hacerte un collar.