Yo no saco singles, saco variantes covid,
La prensa siempre ha sido parte importante del lobby
Algo tuvo que morir en mí pa' que otro don naciera
Aura imperecedera como el legado de Kobe
Yo no pierdo el tiempo, el tiempo me pierde a mí
Solo soy preso del lamento que hay dentro de mi alcancía
La mayor esclavitud es mental, ¿no lo sabías?
Ya te tienen en su bando si te compran con ideologías
Mata al mensajero y eres cómplice también,
Como mataron a Casado señalado por todo el PP
Otra nueva historia y pasa que luego se olvida
Que tienen euro noventa y cinco el precio de la gasolina
Allí donde queden lenguas que se afilan,
Pa' esconder lo que las paredes hablan correrán cortinas
Allí donde queda un alma que ilumina,
Saldrá algún erudito a apagarla con su doctrina
Te voy a decir dos cosas, compadre,
El que vende tanto no lo dice en letras, no lo sabe nadie..
(Ah)
Y el que habla que tanto folla o es que tiene mucha boca o que tiene muy poca polla
Y es que lo natural siempre sale de un plumazo,
Como Sandra Carrasco cantando con su niña en brazos
Soy demasiado viejo pa' fingir ninguna pose,
Pa' que venga un nuevo loser a hablarme de su estilazo
Perdóname Dios porque no sé lo que hago,
Tú échame otro ron que me lo bebo,
Naufrago en este lago de malos tragos y dados trucados,
Te rasco el corazón con la punta de los dedos
Tú eres un niño caprichoso como Djokovic,
Yo en horas bajas sigo en racha, Sasha Djordjevic
No vine a competir,
Y si lo hago tengo que frenar en la recta final,
Mirar atrás como Ussain
Desastres no son naturales,
Si mete en la mano el hombre y condiciona el clima del cielo y los mares
El hecho de olvidar principios te trae malos finales,
Como el Psoe dejando al Sáhara en manos de criminales
(Ah)
Y esto que cuento es verídico,
Sale sin maquillar como el titular de un periódico,
De esos que aportan pasta a campañas políticas y matan la verdad,
Credibilidad en estado crítico.
En un mundo de mentiras de cristal,
Que reflejan los bajos estratos de hombres de poca moral
Me digo a diario no te creas nada, porque aquí nada es real, ni siquiera lo que escuchabas...